martes, agosto 01, 2006

Tu nombre

Quemadura trazada en la roca,
se estrella en él cada certeza.

Inminencia, vértigo abismal,
silencio de sepulcro en una noche de mar.

Tu nombre trae silencio, confusión, pasado.

Tu nombre viene volando entre yerbas, olas, páramos.
Trae un ruido antiguo,
sonido de alegría fugaz, residuo de ayer,
melodía destemplada.

Tu nombre es persistente como la lluvia, el hambre, el frío.

Se cobija en el rincón de cada espacio,
en el eco pertinaz de tu recuerdo,
en la cicatriz ignorada, silente,
en el momento impredecible,
que acecha aún en cada paso.

2 comentarios:

sonny_taz dijo...

Cuánta magia en un nombre...

"Tu nombre es persistente como la lluvia, el hambre, el frío."

Es por eso que basta con tener un nombre en la memoria para fundirse en sensaciones...

Muy bueno, realmente bueno.

Saludos =)

Mauro dijo...

Gracias,

Si,...en la medida que algo comienza a tener nombre, de algun modo empieza a existir, pues se convierte en "algo" o "alguien" que recién es identificable del resto, antes de eso, la individualidad se funde en una masa algo amorfa. Hay nombres que nos marcan más que otros, claro.

Saludos a ti también, que estes bien.