viernes, noviembre 11, 2022

49

 

Cabe sólo mirar los cerros florecidos,

respirar y escuchar los latidos propios,

tomarse unos segundos,

                                        para sentir que se está aquí,

como si nunca hubiese habido otro lugar. 


Cabe preguntarse sin llegar a hacerlo,

acariciar, sonreir, sentir las hojas y los troncos,

recordando que hubo un árbol,

                                    frente a la pequeña casa que fue del abuelo,

 donde hoy sólo habita un vacío mustio.

 

Cabe recordar las hortensias,

los amigos que se fueron,

a quienes fueron importantes,

                                    y sonreir por los saludos,

por lo comido, lo bailado y lo bebido.

 

                                    También por lo amado.


Cabe hacer y no hacer demasiado,

pero sobre todo cabe agradecer la oportunidad,

empuñando la ilusión, el deseo y la fuerza,

                                de estar a la altura,

para sentir que los 49 giros han valido la pena.


martes, octubre 25, 2022

Siempre

 

Y aqueña niña te mira

y te dice papá

Aunque sabes que algun día,

quizás ahora, tal vez mañana,

te diga padre.

Y su alegría

parecerá apozarse

en una calma adulta,

cuando tu en verdad

seas el niño que mira

a la que alguna vez fue,

ha sido,

y será siempre

tu hija adorada.

domingo, julio 31, 2022

Resiliencia

 

Sobre el pecho de la noche cruzaré los brazos.

Para observar el rastro de cada estrella que caiga,

encendida y frágil como las promesas.

Para emerger de mí acallando el ruido que ahoga,

germinando sin saber cómo ni porqué.

 

Ante la caricia del día bajaré la mirada.

Para escuchar los rasguños del tiempo,

en el patio de tus carreras y juegos.

Para vaciarme de mí y encontrar la paz

que esboza esa sonrisa tuya, que pudo haber sido nuestra.

jueves, abril 14, 2022

Jardín

Entre los árboles encuentro,

aquel espacio que me lleva al centro,

de todos los silencios,

en donde yace aquel azul,

que pinta los girasoles,

dibujando el paréntesis calmo,

que traza el columpio herido,

junto a esa risa amarilla,

que llena de pétalos,

tu pasar por el jardín.