jueves, noviembre 23, 2006

Me largo

Es que es una forma más tajante de decir que me despido, un modo de evitar ese instante de dolor leve que se produce al dejar lo que entendemos por nuestra existencia normal, lo que hemos construido y concebimos como que nos pertenece, nuestra vida al fin y al cabo.

Y no hay como un viaje para cambiar de ritmo apretando el switch, dandole vuelta a la perilla de la monotonía, la enemiga más encarnizada de nuestro día a día. Es que viajar es un quiebre, muchas veces un medio, pero también un fin en sí mismo.

No estar quieto nunca, sentir el vaivén en los pies, ese algo en el pecho que te anima a ir más allá siempre. Hay algo muy de vida en un viaje, es que somos jóvenes mientras queremos movernos, mientras rechazamos quedarnos en lo que estamos, sentimos que el envejecer no es más que permanecer arrumbado entre cojines sin tener siquiera el ánimo de intentar otra cosa, el statu quo, la reacción.

Quizás llegue el momento algún día en que, sin sentirme viejo, ya no quiera viajar más, en una de esas porque en ese instante sienta que ya construí lo que debía, que ya cumplí mi papel por estos lados. Pero eso es algún dia, hoy es hoy, así es que aprovecho para decirle a ese posible yo, libertariamente, que lo mejor del viaje es el viaje, pero también, y en una faceta más conservadora (ok, tengo 33), que lo mejor del viaje puede ser el regreso, esa imagen que queda al volver, simplemente, su recuerdo.

Hasta la próxima.

10 comentarios:

Paola dijo...

BUEN VIAJE

Marce dijo...

un viaje siempre conlleva un descubrir(se), reconocer(se),disfrutar(se)...espero la isla te reciba con los brazos abiertos y con el mismo cariño que tú guardas por ella.
Un abrazo y acá te estaremos esperando.

Fran dijo...

Los viajes siempre han sido -sobretodo en la época Medieval- una forma de buscarse y también de perderse, de morir, perder la cabeza, sólo para al final volver a encontrarla.
Que tengas un hermoso viaje y ojalá pierdas un poco la razón (a veces hace bien)
Saludos !

Princesa dijo...

Recien llegada de mi viaje, te deseo lo mejor en el tuyo.
Los aires nuevos son necesarios para poder continuar el camino.
Espero tu regreso con ansias.
Besos desde el mar :)

Negra dijo...

Mauro:

Buen viaje, se que necesitas alimentarte, asombrarte, sorprenderte, sentirte vivo, es el mismo recurso que me hace a mi, sentir los latidos en mi pecho.
Hace un tiempo, escribi este post para mi blog, te lo regalo solo a ti. Cuidate y ya habrá tiempo para casas en el campo de grandes ventanales, proyectos compartidos, tiempo para plantar un arbol, y descansar en una hamaca.

Besos.



vivir en aeropuerto, entre llegadas y partidas permanentes,
no sólo la mía, sino la tuya, la de tantos.
las estaciones del tren, son antesalas de otra nueva historia, o también la ultima estación,
es el fin de alguna de ellas. historias que van hiladas por una falta de sentido común, me atraviesan y esperan.

pasajera eterna, de viajes cortos, de amigos en ciudades lejanas, de amores olvidados, de retornos, de huidas.
de lejanías permanentes, ausencias. mi llegada a veces, es alegría, a veces, mi partida es desapercibida.
búsqueda permanente, cuidadana de clase turista, en una mano mi ticket, en la otra sostengo el contenido justo de pertenencias en mi maleta. no me quedo, no te quedas, nunca nada es permanente, eterno.
Es ser nadie, una vez más. Es mirar e ilusionarse, es novedad, es maravilla, es soledad.

cada vagón, algo que aprender, cada gate, algo que olvidar.
no encuentro entre multitudes, razones para detenerme.
llega la hora para dejarlo todo, y quedarse con el pasaporte y lo puesto.
en el tablero, hay mil vuelos, uno de ellos es el tuyo,
café fresco, y en mi monedero hay billetes de colores.
al lado mío una pareja no puede dejar de despedirse,
las servilletas dedicadas no absorben su próxima distancia.

Sólo observo, en silencio, mi partida.

el gato utópico dijo...

Compadre... parece que se va de viaje... cárguese de imágenes, de sonidos, de gente y después nos cuenta. Buen viaje y déjese de joder... conservador a los 33... que deja para uno que pasó de largo los 40 y encima no se detienen... y mire que trato pero no hay forma. Bueno, que le mando un abrazo.

Anónimo dijo...

¿Esto no será una despedida de la blogoterminal?

Besos preocupados.

Mauro dijo...

Pao: Gracias, leo tus buenos deseos ahora que ya regresé.
No hay caso, siempre volvemos.

Marce: Sí...de redescubrimiento en este caso. Cada vez me cuesta dejarla más.

Saludos.

Fran: Me perdí muchas veces, alguna vez me encontré de nuevo alá. Esta vez fue distinto, me perdí un poco, que quizás no es más que encontrarse otro poco.

Gracias, totales.

Princesa: Desde el mar tus besos, del único lugar que lleva por nombre patria de todos. Besos con ansias, besos de sangre azul.

Te envío mis caricias plebeyas de sangre roja.

Mauro dijo...

Negra:

Me regalas un viaje, una sorpresa envuelta en movimiento, el descubrimiento de lo posible y lo imposible, lo que yace en todo por-venir.

Y una travesía es el mejor regalo, pues nada en ella es inmutable. Te agradezco, y espero me aceptes una idea en forma de viaje, un pétalo que tal vez mañana sea un ramo de alelíes.

Me dejas sin palabras, así es que doy un paso al lado y dejo que las flores hablen por mí.

Dos gardenias para tí.
Gracias.

Mauro dijo...

Gato: Socio, tiene toda la razón, un momento de melancolía reaccionaria quizás. Fue un viaje corto, pero de esos potentes, tuve algunos cables a tierra fuertes, pero a cambio, me recargué de aire, mar y viento.

Un mate en tu nombre. TA!.

Ella: Falsa alarma, la blogoterminal me transportará algún rato más aún. Quien sabe, en una de esas coincidimos en alguna estación, ¿sabes? me halaga tu preocupación.

Arrumacos cariñosos.