Foto: Luis Farrolas De vez en cuando viajo en tren. Y viajar en esos tubo metálicos encapsula, desconecta del mundanal día.
Entras al carro que quedó en frente tuyo en el andén, y te envuelve una sensación de aislamiento, de paréntesis temporal entre lo que hacías hace un rato y lo que piensas hacer cuando llegues a destino. Entonces el tren acelera, y con tu ojo posado en el interior, percibes como el paisaje afuera comienza a desaparecer lentamente, volviéndose difuso mientras los colores son barridos por un brochazo que los vuelve confundibles, como si chapotearan en un mezcla de témpera, de aquella inolvidable clases de artes plásticas del colegio, a la que le echaste mucha agua antes de comenzar a pintar en tu block H10.
No hay mucho ruido en el tren que viajo, las personas generalmente no conversan fuerte, parecen aletargadas por el paréntesis que implica todo viaje. La velocidad, cuando escapa a tu control, parece homogeneizar toda diferencia, eliminando los matices, haciendo confundibles a los unos con los otros, todo es un lapsus mientras se viaja en el, nada podría pasar realmente en ese rato que media entre dos destinos.
Alguna vez viajé en otro tren, uno antiguo, bullicioso, lleno de bultos por todos lados, en esos brillaba la diferencia de todo tipo. Aquella que despertaba al compás del crugir de materiales metálicos, ruidosos, en donde el reino de los polímeros-soporíferos no era más que una fantasía descarriada del tipo "Viaje a las Estrellas", con Sr. Spock inlcuido.
Ese viaje, en un tren llamado "El Rápido" duró 27 hrs, en un trayecto que un bus actualmente hace en 14 hrs. Pero, ¿para que tanta prisa?, ¿para llegar más rápido?, como si la gracia fuese la llegada en vez del viaje, como si buscásemos pasar por alto la mayor parte de los detalles posibles en una carrera desatada y sin frenos de modo tal de olvidar rápido que estamos en un permanente viaje que llamamos vida.
Un tren antiguo no es sólo un tren, es un espectáculo, uno de esos que disfrutas mientras estás tendido en una colina con algo de pasto, mientras disfrutas de un sol agradable de media tarde. Más que un espectáculo de hecho, es una inspiración. Una de esas para las cuales faltan palabras y sobran sensaciones.
Lihn lo dice mejor que yo.
Me despido de una muchacha
cuyo rostro suelo ver en sueños
iluminado por la triste mirada
de trenes que parten bajo la lluvia
6 comentarios:
En este mundo cada vez más rápido, donde todo es al "instante", donde captamos los momentos en teléfonos con cámaras, volamos en aviones y compramos por internet.......recordar viajes en tren es hablar de nostalgia de buenos recuerdos....de algun minuto de mi infancia...¿por que fascinaran tanto los trenes?, hoy por hoy veo a mi sobrino Emilio cuando simplemente pasea en el Bio Tren de Concepción y sus ojos brillan, solo por el hecho de andar un par de estaciones a casa de su abuela, es toda una aventura, es magia...esa que alguna vez senti.
Titi
En este mundo cada vez más rápido, donde todo es al "instante", donde captamos los momentos en teléfonos con cámaras, volamos en aviones y compramos por internet.......recordar viajes en tren es hablar de nostalgia de buenos recuerdos....de algun minuto de mi infancia...¿por que fascinaran tanto los trenes?, hoy por hoy veo a mi sobrino Emilio cuando simplemente pasea en el Bio Tren de Concepción y sus ojos brillan, solo por el hecho de andar un par de estaciones a casa de su abuela, es toda una aventura, es magia...esa que alguna vez senti.
Titi
Me encanta viajar en tren. Es mucho mejor que el avión. Dónde va a parar.
El tren es literario.
Besos orgiásticos.
Titi: Si, quizas es la nostalgia, pero asocio el gusto por los trenes antiguos, de esos con humo, con resoplidos de vapor...aunque nunca me subi a uno....
Dicen que antes era un paseo familiar subirse a unos...con sandwiches, bebidas y huevos duros incluidos.
Gracias por pasar y saludar.
Ella: y libertario.
Osculos ferroviarios.
me gusta viajar en tren, aunque hace tiempo que no lo hago, me encantaría hacer una viaje de esos que recorrer Europa en tren, no pido nada, no?
te dejo un beso.
Malizia: Me encantaria un viaje en tren tambien, por Europa no estaria mal, y si es con buena compañia, mejor, en "Antes del amanecer", creo recordar, viajan en tren.
Es verdad, pedimos tan poco a veces.
Un beso, dos mejor.
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